Julia Roberts ha mostrando y normalizado el vello en las axilas

La respuesta de la actriz al memorable momento ha dado la vuelta a la red.

Por Jabeen Waheed vía Glamour

El vestido de Vivienne Tam de Julia Roberts, junto con sus axilas sin depilar, en el estreno de Notting Hill en 1999, pasará a la historia como una de las apariciones más icónicas en la alfombra roja.

Mientras que ahora es habitual que estrellas empoderadas como Amandla Stenberg, Bella Thorne, Halsey y Paris Jackson muestren con orgullo el vello de sus axilas, la leyenda de Hollywood, Julia, parece haber dado origen al movimiento ‘abraza tu vello corporal’ a finales de los noventa.

Al llegar a la alfombra roja de la entrañable comedia, que también protagonizó Hugh Grant, las axilas sin depilar de la entonces actriz de 31 años eran visibles mientras saludaba a los espectadores, y dieron pie a muchas conversaciones sobre por qué había abandonado la maquinilla de afeitar. Como era de esperar, la prensa sensacionalista expresó su desprecio por la supuesta rebelión de Julia Roberts contra los cánones de belleza y especuló con que tal vez estaba haciendo una declaración feminista.

O tal vez, el vello corporal era algo que le gustaba a su entonces novio Benjamin Bratt, se preguntaban. Como si Julia Roberts intentara tener un aspecto determinado por las preferencias de su amante.

Julia, quien nos ha dado clases de estilo, sólo abordó la especulación de vuelta en 2018, durante una aparición en el programa de entrevistas de E!, Busy Tonight, presentado por Busy Philipps, y las citas han estado haciendo las rondas de nuevo en línea últimamente.

Busy dijo: ‘Mostraste la axila peluda en el estreno de Notting Hill, y nunca dijiste realmente si eso era como una declaración. Y cuando era más joven, lo tomé como una declaración. Pensé que era realmente punk rock y genial’.

‘Y me preguntaba si en ese momento sentías que era una declaración punk rock o si literalmente estabas como: No puedo. No puedo afeitarme las axilas este mes’.

Julia respondió: ‘La imagen está vívida en mi mente, en realidad, desde ese momento’, antes de pasar a explicar que el momento no fue en realidad una declaración feminista intencionada sino, de hecho, un descuido accidental de cómo quedaría el vestido en su cuerpo.

FRED DUVAL