El pasado 21 de julio, funcionarios de Salud Pública del estado de Nueva York informaron un caso de poliomielitis, mejor conocida como “polio”, el primero detectado en Estados Unidos en casi una década.
De acuerdo con los reportes del Departamento Estatal de Salud, el caso se registró en el condado de Rockland, Nueva York. La persona infectada es un hombre joven no vacunado, que presentó síntomas de la enfermedad hace un mes y desarrolló parálisis.
La enfermedad le habría sido transmitida por otro adulto, este inmunizado con una vacuna viva, por vía oral, método que no se utiliza en Estados Unidos desde el año 2000. Por lo tanto, las autoridades de Salud Pública sospechan que esta persona contrajo el virus fuera del país:
Parece que la persona tenía una cepa del virus derivada de la vacuna, tal vez de alguien que recibió una vacuna viva, disponible en otros países, pero no en los EE.UU., y la propagó.
Además, las autoridades informaron que el paciente no ha viajado fuera del país recientemente y que ya no es considerado contagioso. Sin embargo, se está investigando cómo ocurrió la infección y si otras personas pueden haber estado expuestas al virus.
Los funcionarios de salud pidieron a los médicos que permanezcan atentos a posibles nuevos casos e instaron a los residentes del condado de Rockland que no están vacunados a hacerlo.
La poliomielitis es una enfermedad viral altamente infecciosa, incapacitante y potencialmente mortal, que afecta principalmente a niños menores de cinco años. Se transmite a través de las heces o secreciones de nariz y garganta de una persona infectada. El poliovirus también puede contraerse bebiendo agua o consumiendo alimentos contaminados con materia fecal.
No hay cura para la poliomielitis. Sin embargo, la vacunación puede proteger contra la enfermedad. Los casos han disminuido un 99 por ciento desde 1988, cuando la poliomielitis era endémica en 125 países y se registraron 350 mil casos en todo el mundo.
En el caso particular de Estados Unidos, debido a la vacunación, los contagios disminuyeron drásticamente a fines de la década de 1950 y principios de 1960. La última infección natural registrada en el territorio data de 1979. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el último caso conocido de poliomielitis en los Estados Unidos fue en 2013.
Aunque ha sido erradicada de la mayoría de los países, actualmente, la versión salvaje del poliovirus existe solo en Afganistán y Pakistán, pero la vacuna oral, que contiene pequeñas cantidades de poliomielitis debilitada pero viva, sigue causando brotes ocasionales en otros lugares.
El pasado mes de junio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que se había detectado un tipo de poliovirus derivado de la vacuna en muestras de aguas residuales en Londres. Sin embargo, no se reportaron casos de poliomielitis.