El término feminicidio se ha utilizado para describir los asesinatos de mujeres relacionados con el género, ya sea por parte de su comunidad, pareja o miembros de la familia. Un delito que indigna y sacude a la sociedad en general.
Lamentablemente, la cantidad de homicidios de mujeres clasificados como feminicidios ha crecido de manera exponencial en los últimos años, siendo reconocidos a nivel mundial como una de las principales causas de muerte prematura en mujeres.
Aunque este tipo de crimen repercute en las fibras más sensibles de la sociedad internacional, recientemente, un intento de feminicidio provocó el asombro de todo el mundo por una escalofriante razón, pues aunque la víctima vivió para contarlo, sufrió una agonía luego de ser enterrada viva por su esposo.
El pasado 16 de octubre, cuando Young Sook An, una mujer estadounidense de 42 años, le pidió el divorcio a su esposo abusivo Chae Kyong An, de 53, el hombre la secuestró de su casa y la hirió antes de enterrarla en un área boscosa, en el estado de Washington.
Aunque de alguna manera, Young logró enviar una notificación de emergencia a través de su Apple Watch, el hombre tomó el reloj y lo rompió con un martillo. Posteriormente, según la policía, el veterano de las fuerzas armadas ató a la mujer con cinta adhesiva, la apuñaló en el pecho varias veces y luego la enterró viva en el bosque en una tumba poco profunda.
Después de ponerla en la tumba, escuchó a su esposo caminar alrededor del hoyo excavado y cubrirlo con tierra.
– Informe policial
Como por milagro, después de pasar varias horas enterrada y ver la camioneta de Kyong con la luz encendida, Young Sook pudo liberarse de su tumba y buscar ayuda. La mujer corrió durante unos 30 minutos hasta que encontró la casa más cercana, desde donde llamó al número de emergencias.
Sin embargo, la policía tardó varias horas en localizarla desde que recibió su llamada, hasta que lograron encontrarla en el depósito de un departamento. Antes de dar con su paradero, los agentes pasaron por la casa de la pareja, pero sus hijos dijeron que sus padres se habían ido. En el lugar, los agentes también encontraron un rollo de cinta adhesiva a medio usar.
Según la investigación, cuando encontraron a Young, esta todavía estaba envuelta en cinta adhesiva alrededor del cuello, barbilla y tobillos. Además, tenía múltiples moretones en piernas, brazos y cabeza y su ropa estaba cubierta de tierra.
La mujer fue llevada de urgencia a un hospital cercano para observación, en donde dijo que trató de respirar girando su cuerpo para que la tierra no la asfixiara debajo de la tumba.
Mientras tanto, Kyong fue detenido por las autoridades. La policía informó que el esposo de Young presuntamente la agredió debido a discusiones sobre su divorcio y división de bienes. Además, la mujer declaró que él la había amenazado antes diciéndole que “prefería matarla antes que darle su pensión”.
Según los fiscales del estado de Washington, Chae Kyong An está acusado de intento de asesinato en primer grado, secuestro en primer grado, asalto en primer grado y acoso con amenaza de homicidio involuntario.